por Sofia La Regina
El debate fue intenso y reflejó la fragmentación política en el Congreso. Aunque el oficialismo contó con el apoyo de aliados como el PRO y la Coalición Cívica, así como algunos sectores de la oposición, la bancada de Unión por la Patria se dividió en sus votos, lo que evidenció las tensiones internas. Mientras algunos sectores apoyaron la suspensión, otros la rechazaron, citando preocupaciones sobre el oportunismo político y el riesgo de eliminar las primarias como herramienta democrática.
El argumento central de quienes impulsaron la suspensión fue la reducción de costos políticos. El jefe del bloque de La Libertad Avanza, Gabriel Bornoroni, sostuvo que las PASO eran una "encuesta cara" que solo beneficiaba a la política y que su eliminación representaría un ahorro de 150 millones de dólares.
A pesar de las críticas y la polarización, el proyecto avanzó rápidamente, reflejando la voluntad del Gobierno de eliminar las PASO por este año. La próxima discusión se trasladará al Senado, donde se espera una votación favorable debido a la amplia mayoría que respalda la iniciativa.