Así lo informó la empresa estatal Unión Eléctrica, según la cual, ante una demanda de 3.240 megavatios, las pocas estructuras nacionales, deterioradas y mal mantenidas, en servicio desde hace más de 40 años, son capaces de ofrecer un máximo de 1.310.
En concreto, 7 de las 20 plantas en funcionamiento permanecerán cerradas por mantenimiento, mientras que otras 78 están fuera de uso por falta de diésel.
Desde agosto del año pasado, debido a averías y escasez de combustible, fue necesario imponer racionamiento diario durante muchas horas al día.
La situación ha empeorado desde octubre, cuando dos huracanes y dos terremotos causaron tres apagones nacionales y más daños a la ya desastrosa red eléctrica nacional.