No brilló y hasta en el primer tiempo, sufrió. Pero los tres puntos viajaron a Avellaneda y eso es lo que importa. El Independiente de Carlos Tevez venció, ajustadamente, a Independiente Rivadavia en Mendoza y así generó un buen arranque en la Copa de la Liga.
Casi que como en una continuidad del año anterior, el Rojo no logra hacer pie en el campo de juego. Y así, Rodrigo Rey, una vez más, demuestra su gran presente como líder de su equipo.
Tras la salida de ese centro que Rey había mandado al córner, el arquero visitante debió volver a intervenir. En esta ocasión lo hizo para conjurar un desvío de Emanuel Mas.
Si bien no era una tromba, el elenco mendocino mostraba una mayor superioridad ante el Diablo pero, de golpe, su embestida debió frenarse y por culpa de sus hinchas. Es que el asistente principal Diego Bonfá recibió un escupitajo en su ojo y se lo hizo saber a Rapallini, quien debió frenar el encuentro.
Con el comienzo de la segunda parte se dio una de las máximas del fútbol: tiro de esquina mal tirado, gol del rival. Y así, el conjunto visitante logró desnivelar el resultado. Con un contragolpe preciso y certero, el Rojo sorprendió con la llegada al área de Ayrton Costa (lateral por la izquierda), quien recibió la asistencia del recientemente ingresado Toloza, y definió cruzado.